El aceite esencial de Árbol de té destaca por sus propiedades antisépticas, antifúngicas y antibióticas.

Versátil, eficaz y lleno de beneficios, este aceite esencial es perfecto para cuidar la piel, el cabello e incluso la salud bucal. Un multiusos natural que siempre viene bien tener a mano.

Protege contra infecciones. Su potente acción antibacteriana y antifúngica lo hace efectivo para tratar infecciones de la piel, como hongos, pie de atleta y candidiasis. Además, desinfecta heridas, picaduras, quemaduras y favorece la curación de afecciones como herpes, psoriasis y eczema.

Cuidado bucal. Eficaz para curar llagas en la boca y combatir la gingivitis, ayudando a mantener una boca sana y libre de infecciones.

Aliado para combatir infecciones respiratorias. Sus propiedades antimicrobianas ayudan a proteger y fortalecer el sistema respiratorio contra resfriados, gripes y otras infecciones comunes del invierno.

Piel y cabellos grasos. El aceite de árbol de té es especialmente efectivo para equilibrar la piel grasa y combatir el acné juvenil. Ayuda a regular la producción de sebo manteniendo la piel limpia y sana. También es muy útil para el cuidado del cabello graso, controla el exceso de grasa y mantiene el cabello saludable. Además, su poder para repeler piojos lo convierte en una opción natural y eficaz para mantener el cabello protegido de estos molestos «visitantes».

SOBRE EL CUERPO:

Antiséptico

Bactericida y fungicida

SOBRE LA MENTE:

Tonificante

COSMÉTICA NATURAL:

Piel grasa y acné